Ayer me habló mi primo Ramiro para felicitarme por el año nuevo. Sabiéndolo cliente de cuanta teoría catastrofista y conspiratoria se le cruza, aproveché para preguntarle si ya se estaba preparando para el fin del mundo que supuestamente nos tenían prometido los mayas desde hace siglos.
–Es absurdo eso–, fue su inesperada respuesta. –Lo que termina el 21 de diciembre de 2012 es solamente un ciclo del calendario maya, obviamente para empezar otro.
Me asombró oírlo tan racional
–Claro, primo, con todo esto hay que ser racionales–, agregó–. Además, 2012 es un número muy malo para que se acabe el mundo. Ni es número cerrado, ni capicúa... su suma es 5, que no tiene nada de aterrador. Si fuera 8, por ejemplo... O todavía 13. ¿Pero 5? ¿A quién se le ocurrió que podría significar el fin del mundo?
3 comentarios:
Jajaja...
Hola Jorge... y si... feliz año (¿a quién se le ocurrió que no fuera el 2012 de los chinos?)...
Y aunque no creas, aquí ando.
Cuando tengas tiempo, te invito a ver de lo que ahora vivo:
http://www.flickr.com/photos/btorillo/
o
http://www.flickriver.com/photos/btorillo/
Que el año te sea bueno y la vida te sonría mucho!
Según los chinos es el año del dragón, tradicionalmente de buena suerte. Veamos.
Felicidades por las fotos, las que pude ver están excelentes. Tendré que regresar con más tiempo.
¡Feliz año, capicúa o no!
Estando en Yucatán me entero que a ninguno de mis paisanos les interesaba el fin del mundo...pero de repente me paso por la mente estando serca de Chicxulub... así, racionalmente y me dio escalofríos pensar en los dinosaurios, ...Que tengas un buen año :)
atte raissa opcional
Publicar un comentario