Ahora entiendo...
Desde un principio me opuse a la invasión de Irak, por razones que yo suponía más humanistas. En principio, el rechazo a la violencia en sí como solución a los problemas; la indignación ante la prepotencia de un lidercillo que cree poder imponer su voluntad en todo el mundo; la preocupación por el deterioro de la situación en el Medio Oriente en general.
Sin embargo, según una prueba de personalidad , resulta que yo soy similar a Saddam Hussein.
¿Será por eso que en el fondo quería defender a quien en realidad es mi alma gemela?
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